7 julio, 2004
Siempre hemos oído que Japón es carísimo, y parece que uno se deja el destino para la edad dorada en que pueda viajar despreocupándose del dinero. Los azares de evitar el avión me pusieron el Imperio del Sol en el camino, y allí que me lancé con mi mochila, pues las últimas informaciones indicaban que […]